Es un cambio a nivel emocional, cognitivo y conductual que permite cerrar una etapa y continuar con la vida; es natural y necesario. La persona que vive un duelo atraviesa, generalmente, cinco etapas.
Por Rosa Cornejo Briceño. 08 noviembre, 2022. Publicado en Correo, el 8 de noviembre de 2022.
El duelo es un proceso de adaptación emocional a una pérdida significativa que, generalmente, se asocia a la pérdida de un ser querido, pero también puede tratarse de la pérdida de un empleo, una relación de pareja o cualquier situación en la vida de una persona que exija adaptación y conlleve sufrimiento profundo.
Es un cambio a nivel emocional, cognitivo y conductual que permite cerrar una etapa y continuar con la vida; es natural y necesario. La persona que vive un duelo atraviesa, generalmente, cinco etapas. Sin embargo, no siempre se presentan todas las etapas ni se desarrollan en el orden que indicaré a continuación:
- Negación. Se produce un shock; la persona es incapaz de aceptar la pérdida porque hay una desconexión con la realidad. Tiene la función de dar tiempo para procesar la pérdida.
- Enfado o ira. Ya existe conciencia de la pérdida y hay desesperación. Son comunes las expresiones “¿porque me ha pasado a mí?”, “esto no es justo”.
- Negociación. Hay resistencia a la perdida y es una etapa de confusión.
- El duelo. Surgen sentimientos de tristeza profunda y episodios depresivos. La persona se abandona y se desconecta de sus actividades porque está invadida por el dolor.
- Aceptación. Implica entender que lo sucedido es inevitable e irreversible. La persona acepta que deberá seguir con su vida.
La vivencia del duelo depende muchísimo de cada persona. Sin embargo, si se extiende por seis meses o más, es conveniente buscar ayuda profesional.
Recordemos que aceptar no es olvidar, sino que se trata de hacer las paces con el recuerdo.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.
